Parto. Con la ilusión del que comienza un
viaje.
Escribir es un poco viajar. Por el mundo de
adentro. Por el de afuera. Es descubrir mundos y mostrarse a los
demás, como cuando viajamos. Y es también mostrarse a uno mismo, encontrarse o
reencontrarse, como cuando viajamos.
Cuando escribimos y cuando viajamos nos salimos
de lo cotidiano. Y se nos hace más fácil ver nuestra propia vida como
si fuera una película, desde el patio de butacas. Desde la distancia,
en fin.
También escribir y viajar van parejos
a la reflexión. Cuando viajamos tenemos - nos damos - tiempo para
reflexionar. Escribir es bajar al papel el pensamiento, y para hacerlo hay
que reflexionar necesariamente. Reflexionar es pararse, sí, pararse a pensar.
Es no permitir que nos coma el mundo y sus agobios. Reflexionar es desconectar
de los automatismos mentales que, con el día a día y
sus quehaceres, se nos adhieren al alma casi sin darnos
cuenta, atenazando nuestro yo más íntimo, más libre y más
real. Reflexionar nos equilibra. Porque nos permite conocernos mejor.
Buscarnos y encontrarnos. Y en definitiva, también, nos permite mostrarnos
mejor a los demás.
Me gusta escribir, tanto como viajar.
Siempre. Y comienzo ahora a escribir en este nuevo vehículo - mi primer
"blog" - que he querido titular como el diario que comencé a
escribir en cuartillas con dieciocho años: "Parte de mi
vida". Decir que un diario - mensual llegué a llamarlo a veces - es
un reflejo de nuestra vida me parece exagerado. Pero parte de la vida de uno,
sí que es o puede serlo, siempre que se haga con coherencia. Con verdad. El
nombre de aquél diario lo elegí con 25 años. En pleno servicio militar, en
el que tan habituado estaba a dar partes a la cadena de mando. Pensé
entonces que el doble significado, el de parte como porción de algo mío y
el de parte como comunicación de algo mío, es apropiado para un diario. Y hoy
creo que también es buen nombre para esta aventura que comparto con los que
vengáis por aquí.
He aquí pues el inicio de este viaje. He aquí
parte de mi vida. En este "blog" daré parte - comunicaré -
algunas cosas que a partir de ahora piense o sienta.
¡Cuánto me queda por viajar! ¡Cuánto por
escribir! Me gusta. Me ilusiona. Me da vida. Me rejuvenece.
Así que parto y comparto. Un parto, por cierto,
también es el comienzo de una vida. Como buen ubetense, llevo en la sangre
el Renacimiento Humanista (RH) muy, pero que muy positivo.
Reflexionar, buscar, comunicar, compartir,
viajar, escribir. En el principio de este "blog", vayan por delante
estos verbos como banderas.
Hola Adrián:
ResponderEliminarMe he hecho seguidor tuyo en el blog. En el mundo real -aunque igualmente virtual-, ya lo era, jeje.
Florencio.
¡Por fin un motivo de peso para entrar en internet!
ResponderEliminarComo si de una conga se tratase, yo también te sigo. A ver dónde nos llevas de viaje....
Un placer.
Hace muchos años(38) que soy seguidor de esa "Parte de mi vida". Un beso.
ResponderEliminarPapar.